Fricasé de pollo con nueces caramelizadas y arroz con curry

Un Fricasé o Fricassée es una especialidad de la cocina gala que con el paso de los años ha sufrido muchas modificaciones, cada región o país que ha adoptado esta técnica culinaria ha cambiado ingredientes para adecuarlos a los productos autóctonos y a sus paladares. Hoy en día se elaboran multitud de variantes del fricasé, un plato siempre lleno de sabor.
Este plato se asemeja al ragú, un guiso o estofado elaborado con carne troceada y vegetales, pero con la diferencia, de que el fricasé necesita una cocción menos prolongada y se frie la carne antes de guisarla en una salsa blanca. 

Os dejo la receta de un delicioso fricasé de pollo acompañado de unas exquisitas y crujientes nueces caramelizadas, todo un plato sencillo en su elaboración y con un resultado espectacular en su sabor.

Lavar la carne, secarla y cortarla en dados de 2 cm. Mezclar la salsa de soja con el jerez, el azúcar, la sal y la maicena. Verter todo sobre la carne troceada.

Caramelizar las nueces (receta más abajo) y reservar.

Cortar el pimiento, la cebolla y el apio en juliana.

En una sartén mediana, añadimos 3 cucharadas de aceite de oliva para sofreír primero el apio, luego la cebolla y por último, el pimiento rojo, dejando freír cada verdura 1-2 minutos hasta dejarlas al dente.

Retirar las verduras de la sartén.


Calentar en la misma sartén el resto del aceite y freír a fuego fuerte la pechuga de pollo troceada, unos 3 minutos, hasta dorarla. Incorporar las verduras salteadas anteriormente.

Bajar el fuego y verter el caldo de ave dejando espesar la salsa.



Cocer en agua con sal el arroz. Retirar, pasar por agua fría y escurrir.

En una sartén con un poco de aceite de oliva, saltear el arroz junto a las pasas, el curry y el jengibre durante 3-4 minutos a fuego medio.
Retirar del fuego e incorporar el perejil picadito.




Servimos el fricasé de pollo bien caliente, con las nueces caramelizadas por encima y acompañado por el arroz al curry. 


Es de lo más fácil y están igual de deliciosas para acompañar a diversas recetas o como tentempié mientras se disfruta de una buena película bien sea en casita o en el cine, seguro que os encantarán.


Limpiar un poco las nueces, ponemos a hervir el agua y el azúcar removiendo continuamente, cuando rompa a hervir, añadimos las nueces al almíbar.

Dejamos hervir aproximadamente 8-10 minutos la mezcla de agua y azúcar, hasta que el almíbar se vuelva de un color más dorado pero sin llegar a caramelizar en exceso.

Sacar las nueces con una espumadera y dejar escurrir sobre papel de horno.

Mientras, poner abundante aceite en una sartén y cuando este bien caliente, freír las nueces por tandas, no dejar mucho rato en el aceite porque se oscurecen y afean, sólo vuelta y vuelta.

Sacar de nuevo con espumadera y se van poniendo sobre papel de cocina o sobre un escurridor.


A medida que se enfrían se endurecen y se pueden coger sin que queden pegajosas. El resultado: unas nueces sueltas, crujientes y con un sabor delicioso.