El Djadjik tal cuál parece ser que tiene un origen judeo-sefardí, al igual que otros muchísimos platos que a buen seguro conocemos, como los boquerones en vinagre, los gazpachos, escalivadas, mazapanes y un largo etcétera de elaboraciones que aún hoy en día están en nuestra mesa casi a diario. Esta es otra receta que quiero dedicar a la cocina sefardí, una gastronomía que ha marcado la cocina tradicional española en muchos de los platos que aún hoy, elaboramos con frecuencia.
La presentación de esta crema tiene muchas connotaciones y desde luego muchas presentaciones, pero de lo que no cabe duda, es que si te gusta el pepino, disfrutarás especialmente con la receta de hoy.
1/2 litro de yogurt natural cremoso
1 pepino
1 limón
1/2 vaso de agua muy fría
Unas hojas de menta fresca
1/2 cebolleta fresca
Pimienta
Sal
Con ayuda de un pelador de patatas, cortamos unas lonchas longitudinales lo más fino posible que podamos, las cuales usaremos para decorar.
Comenzamos lavando bien el pepino y retiramos las protuberancias más sobresalientes.
Con el resto del pepino, lo troceamos a tacos pequeños.
Ambos, lonchas y tacos los reservamos en agua a la que le añadimos el zumo de un limón.
En una salsera, ponemos el yogurt y añadimos el agua fría, batiendo hasta conseguir una mezcla homogénea. Ahora, incorporamos el pepino cortado en tacos junto a un chorrito de limón y removemos.
Salpimentamos el pepino cortado en lonchas.
En los recipientes donde vayamos a servir la crema, ponemos la mezcla del yogurt con el pepino cortado a tacos y decoramos con el pepino loncheado dándole forma de rollito.
Llevamos los recipientes al frigorífico y dejamos enfriar no menos de una hora. Antes de servir, decoramos con la cebolleta cortada en aros y espolvoreamos con la menta picada.
Se suele acompañar con pan ácimo o con tortas de maíz.
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